
Precios atractivos, pero que alejan el sueño de reemplazar los cuadernos de siempre por un ordenador portátil. En fin, siempre quedará la versión 2.0 (cruzamos los dedos).
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La que fuera “solo” la suite de grabación en Windows por excelencia se renueva, pero insistiendo en la inclusión de una pléyade de herramientas añadidas que a algunos molesta y a otros complace.
La release 1 de Nero 8, muestra como número de versión la 8.1.1.0, con un archivo descargable de 181 Mbytes disponible durante 15 días como periodo de prueba tras la instalación.
Según las notas de la versión viene optimizado para Vista, incluyendo un gadget en la barra lateral para acceso rápido a la grabación de discos o “realizar proyectos con funciones de un solo clic”.
Además soporta creación de video de alta definición en formatos de vídeo Blu-ray BD-AV y HD DVD e incluye herramientas de exportación de contenidos a dispositivos como iPod o PSP.
El precio recomendado es de 69,99 euros con un descuento especial para las actualizaciones en línea de anteriores versiones.
Tras algún problemilla con la reproducción automática, el software comienza a instalar hasta que aparecen las clásicas instrucciones de pinchar el aparato en el puerto USB.
Dado que es un producto Microsoft, un CD de software de Microsoft y un sistema operativo de Microsoft la ventanita con el aviso “si conoces el fabricante de tu dispositivo puedes visitar su página web en busca de controladores”, parece un chiste.
En un acto de buena fe el usuario visita la página web como no de Microsoft y descarga los 117 Mbytes del software “actualizado” para su LifeCam.
Una vez descargado nuevo intento de instalación y nada de nada. El sistema indica que el software ya está instalado y que desinstale primero. Conclusión, de driver actualizado nada, es el mismo controlador que viene en el CD.
El sufrido usuario para mejorar la experiencia de cliente y empresa intenta reportar el problema mediante la ayuda en línea, como no de Microsoft.
La respuesta no se hizo esperar con un aviso de advertencia: “Un error desconocido ocurrió. Por favor inténtelo de nuevo en unos minutos.”
Total, la Webcam de adorno en el escritorio. ¿Si Microsoft no soporta correctamente ni sus propios dispositivos en Vista como espera que otros fabricantes lo hagan? No hay respuesta.
En primer lugar, el sistema con dos micros cuádruples Xeon de Intel basados en la nueva micro-arquitectura a 3,20 GHz ofrecerá un rendimiento en coma flotante superior que los servidores actuales con procesadores duales. Aunque los resultados de una máquina 2P con un par de Opteron de AMD cuádruples parecen potentes, su rendimiento es mucho menor que el que ofrecen las máquinas 2P con las series Xeon 5400 de Intel (con una CPU a 3,20 GHz de velocidad y una velocidad en el bus del procesador de 1,60 GHz).
En la actualidad, el procesador cuádruple Opteron de AMD no supera al Xeon de Intel en lo que se refiere a computación de números enteros con la misma velocidad de reloj. Sin embargo, la nuevo micro-arquitectura de los chips cuádruples de AMD permite a la CPU superar en rendimiento a la CPU cuádruple Xeon de Intel en un 26 por ciento, al menos en lo que respecta a los cómputos en coma de flotación. Podéis ver los resultados completos publicados por la SPEC en la tabla.
Sin embargo, Gizmodo mantuvo una charla con el famoso iPhoneDev Team y estos desarrolladores - responsables del software para liberar el teléfono de Apple - contestaron a las preguntas clave tras este descubrimiento.
No sólo eso: según estos desarrolladores, Apple podría haber publicado la actualización sin dañar esa zona, permitiendo a los usuarios seguir utilizando sus teléfonos liberados, e incluso sacar un firmware que devolviese los iPhones liberados a su estado original para que no pudiesen ser utilizados sin el contrato con AT&T.
Muchos más detalles en la entrevista a los desarrolladores del iPhoneDev Team en Gizmodo.
El sistema que utiliza es enviar por la red la copia a un servidor destinado a la traducción y combinar esto con algoritmos que distinguen entre texto, dibujos y líneas para mantener la composición original de las páginas.